Día 9 La Paz Sea Contigo
Jehová Shalom: El Señor de Paz

Por Chris y Sarah McKinney
Directores, Pensacola Men & Women

Versículo Clave:
Jueces 6:23-24: «Pero Jehová le dijo: Paz a ti; no tengas temor, no morirás. Entonces Gedeón edificó allí un altar a Jehová, y lo llamó Jehová Shalom. Hasta hoy está en Ofra de los abiezeritas.»

En Jueces 6-8 encontramos la historia de Gedeón. El pueblo de Israel había desobedecido al Señor, una vez más, y estaba siendo devastado por los madianitas. Durante siete años, los madianitas destruyeron los cultivos de los israelitas, mataron su ganado y dañaron sus tierras. En Jueces 6, Gedeón está trillando trigo en el lagar para esconderlo de los madianitas. Un ángel del Señor se le aparece. Gedeón duda, pero eventualmente reconoce que es el Señor quien le habla a través de una señal milagrosa. Aunque tiene miedo, Dios le asegura que no morirá y declara paz sobre él. Gedeón construye un altar y lo llama Jehová Shalom: El Señor es Paz.

Lo interesante de esta historia es que, inmediatamente después de que Gedeón experimenta la paz de Dios, es enviado a una misión que lo lleva a la guerra. Aunque la paz se describe a menudo como la ausencia de conflicto, guerra o disturbios, aquí se usa la palabra hebrea Shalom. Shalom significa: plenitud, bienestar, seguridad, paz. Es una palabra abarcadora que describe la providencia total de Dios en nuestras vidas como creyentes.

Gedeón entendió que el Dios de paz estaría con él en la próxima tarea que Dios le había asignado. Esto fortaleció la mano de Gedeón para lograr lo que parecía imposible. Jesús dice a sus discípulos en Juan 16:33: «Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.»

En un mundo a menudo incierto, la paz es algo muy buscado. Como cristianos, podemos tener paz porque Dios está presente. Él está involucrado en todos los asuntos del mundo y en cada detalle de nuestras vidas. El desafío que nos deja la historia de Gedeón es construir un altar que nos recuerde que el Dios de paz siempre está con nosotros. Esta paz nos ayuda a cumplir lo que Dios nos ha llamado a hacer. Sin importar el caos a nuestro alrededor, podemos tener su paz dentro de nosotros. Él es paz, y si lo tenemos a Él, tenemos paz.

Paz sobre nuestras vidas personales.

Paz sobre nuestras familias.

Paz sobre nuestro personal, internos y estudiantes en todos los lugares de Teen Challenge en el mundo.

Señor, te agradecemos por tu paz y porque nos has dado acceso a ella cada día. Pedimos tu paz sobre nuestras vidas, nuestras familias, nuestros ministerios y el mundo entero. Isaías 26:3 dice: «Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera, porque en ti ha confiado.» Fijamos nuestra mente en ti, Señor, y te agradecemos por tu perfecta paz.

Enfoque de Oración de Hoy: Personal y Internos